La Organización Casa de Ana Frank coopera al respecto con clubes de fútbol nacionales e internacionales, la Asociación Real Neerlandesa de Fútbol (KNVB) y el gobierno de los Países Bajos.
Disfrutar del fútbol y, a la vez, enfocarse contra el racismo durante la Eurocopa
ilustración COUP / Peter van den Hoogen
9 de Junio de 2021 — Camino a la Eurocopa, la Casa de Ana Frank aboga por enfocarse contra el racismo relacionado con el fútbol, además de disfrutar del evento deportivo. Desde 2015, la Casa de Ana Frank lleva adelante proyectos educativos para combatir las expresiones racistas y los cantos antisemitas en los estadios de fútbol y sus alrededores.
‘Se puede apreciar que existe cada vez más atención al tema del racismo relacionado con el fútbol. Es por ello, que diferentes partes involucradas unen sus fuerzas para luchar contra este flagelo. Esta actitud es muy positiva. Especialmente es importante continuar con el proyecto para ponerle fin al racismo y antisemitismo, de una manera conjunta, dentro y fuera de los estadios de fútbol.’
Durante años, las expresiones racistas y los cantos antisemitas en los estadios de fútbol y sus alrededores fueron tildados de «inocentes» e «incidentales». El punto de inflexión ocurrió durante el partido entre los clubes neerlandeses FC Den Bosch y Excelsior, el 17 de noviembre de 2019. El jugador de Excelsior, Mendes Moirera se retiró del campo de juego con lágrimas, tras las expresiones racistas que los seguidores del FC Den Bosch le habían gritado. Esta fue la gota que rebalsó el vaso y dio como resultado un plan de lucha, bajo el lema: «Nuestro fútbol es para todos» coordinado por la Asociación Real Neerlandesa de Fútbol (KNVB) y subvencionado por el gobierno neerlandés.
Proyecto «Cantos en estadios»
Como parte de este plan, la Casa de Ana Frank organizó talleres de Juego Limpio (Fair Play workshops) para jóvenes y el proyecto «Cantos en estadios» específicamente para aficionados de fútbol. En este último proyecto mencionado, los simpatizantes de fútbol asisten a un programa intensivo de un día para concientizarse sobre las acciones discriminatorias que se vociferan desde las tribunas de los estadios. El principal componente del programa es el gran sentimiento de fidelidad y la pasión que los aficionados tienen por su club y su ciudad. Además, se centra en la historia del club y la ciudad que lo alberga. Los aficionados aprenden sobre historia y el enorme daño causado durante la Segunda Guerra Mundial y el Holocausto. Además, visitan los monumentos conmemorativos, dedicados a personas fallecidas en ese período e incluso recorren los lugares donde se escondían personas. Participan de encuentros con aficionados judíos, quienes les comentan su conmovedoras historias personales. Además comparten con ellos la gran pasión por el mismo club y pueden identificarse con ellos como simpatizantes de fútbol.
Los aficionados toman conciencia
Joram Verhoeven y Willem Wagenaar de la Casa de Ana Frank comentan: «Vemos una y otra vez que los aficionados se sorprenden cuando se les dice que otros aficionados judíos ya no concurren al estadio, debido a los cantos que se entonan ahí. Inesperadamente, hay una cara que se identifica con el judío al que esos cantos refieren cuando gritan «a la cámara de gas». Y luego, de repente, se torna incómodo y ya no resulta tan divertido. Esa toma de conciencia hace que un gran número de aficionados decidan no participar más en estos cantos de estadio.»
Cooperación
La Casa de Ana Frank ha comenzado el proyecto «Cantos en estadios» en 2016, en colaboración con el club de fútbol Feyenoord. Asimismo, ya llevaba cooperando unos años al respecto con el club FC Utrecht. Y en breve, se está preparando un trabajo de conjunto con el club FC Den Bosch. En mayo de 2020, hemos recibido la buena noticia de que, gracias a una subvención de la Comisión Europea, también podremos ponernos manos a la obra a nivel europeo. En este caso, junto con Feyenoord y el club alemán Borussia Dortmund. Este proyecto en cooperación tiene el nombre en inglés: «Changing the Chants», lo cual se traduce en español como «Cambiando los cantos». De esta manera, unimos fuerzas y experiencias, aprendemos unos de otros y proporcionamos conocimientos y perspectivas a otros clubes y organismos de fútbol.