El 1 de abril de 1948 comienza el juicio contra Hanns Albin Rauter. Después de un mes, es sentenciado a muerte, principalmente por su responsabilidad al frente de la deportación de 110.000 judíos neerlandeses. Rauter declara no tener conocimiento que los judíos eran asesinados, lo cual no es cierto. El 25 de marzo de 1949, Rauter es ejecutado por un pelotón de fusilamiento en Waalsdorpvlakte, un lugar de ejecución en las dunas de Scheveningen en La Haya, también utilizado por los nazis para esa función durante la guerra.
El austriaco nazi Rauter fue el miembro de más alto rango de las escuadras de protección nazis SS en los Países Bajos. En su función como Comisario General de las fuerzas de seguridad (Generalkommissar für das Sicherheitswesen) estaba a cargo del orden público en los Países Bajos y de la policía. Además, fue responsable de la deportación de los judíos neerlandeses. Rauter estuvo también muy involucrado en la lucha contra la resistencia.