21 de Enero de 2020
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El 27 de enero de 1945, este año hace 75 años, los rusos liberan el campo de concentración y exterminio de Auschwitz. Otto Frank, padre de Ana, es uno de los aproximadamente 8.000 prisioneros que fueron abandonados allí; en su mayoría, muy enfermos. «Ruski» [ruso] escribe Otto más tarde en esta fecha en un pequeño anotador.
Ante el avance de las tropas soviéticas, las cuales se encuentran cada vez más cerca, los líderes del campo de concentración de Auschwitz deciden evacuarlo. Todo aquel que puede caminar, debe marchar. Durante estas llamadas marchas de la muerte, sucumben muchos prisioneros por el agotamiento, el hambre y las enfermedades, o son ejecutados por los guardias. Otto permanece en la barraca para enfermos del campo de Auschwitz. Se encuentra demasiado débil, pesa apenas 52 kilos y no está en condiciones de emprender la marcha. El 27 de enero de 1945, las tropas soviéticas ingresan al campo de concentración.
Viaje de regreso
Cuando Otto se recupera un poco, inicia el retorno a los Países Bajos. El viaje tiene una duración de meses, pues en grandes áreas de Europa todavia están combatiendo. En el transcurso de su viaje, Otto recibe la noticia que su esposa ha fallecido en Auschwitz-Birkenau. Sobre el destino de sus hijas, no puede enterarse nada. El 3 de junio de 1945, Otto regresa a Ámsterdam. Su esperanza que Ana y Margot hayan sobrevivido los campos de concentración llega a su fin en julio de 1945. Para ese entonces, Otto conoce a las hermanas Janny y Lien Brillleslijper, quienes estuvieron prisioneras junto con Ana y Margot en Bergen-Belsen. Las hermanas Brilleslijper le cuentan a Otto acerca de los últimos meses y las respectivas muertes de sus hijas.
Los escondidos en la Casa de atrás
De los ocho escondidos en la Casa de atrás, Otto Frank es el único que sobrevive a los campos de concentración. En octubre de 1944, Hermann van Pels es asesinado en las cámaras de gas en Auschwitz-Birkenau; su esposa, Auguste van Pels muere cuando es transportada de Raguh a Theresienstadt en abril de 1945 y Peter van Pels fallece en Mauthausen el 10 de mayo de 1945; Fritz Pfeffer muere en Neuengamme el 20 de diciembre de 1944; Edith Frank fallece en Auschwitz-Birkenau, el 6 de enero de 1945; Margot y Ana Frank mueren en Bergen-Belsen, en febrero de 1945.
La reconciliación y los derechos humanos
Otto ha dedicado el resto de su vida a la reconciliación y los derechos humanos en todo el mundo. Él es quien publica el diario personal de Ana a nivel mundial y sienta las bases para la apertura del escondite como un museo, como una advertencia del pasado, pero destinada hacia el futuro. Poco antes de su muerte, dice en una entrevista: «Ahora tengo casi noventa años y mis fuerzas se van debilitando. Aunque la tarea que he recibido de Ana, me da nuevas fuerzas para luchar por la reconciliación y los derechos humanos en todo el mundo». Otto Frank fallece el 19 de agosto de 1980.
